"Muchas veces me preguntaron si tengo algo que ver con Faustino Asprilla, pero ni siquiera lo conozco personalmente", aclara Leider Yoao Moreno Asprilla entre risas. "Compartimos apellido, pero en Colombia es muy común; como si acá dijeras Pérez o García", comenta, ya familiarizado con la Argentina . Sin embargo, hay un nombre célebre que los emparenta: Francisco "Pacho" Maturana.
El atacante colombiano que desde hace cinco años transita las canchas de los torneos Federales llegó a la Argentina bastante tiempo antes, recomendado por el mismo entrenador que, con el Tino Asprilla como genio y figura, comandó una de las selecciones cafeteras más recordadas de la historia. Hecho el link, podemos decir que en Deportivo Madryn juega el Asprilla austral...
"Igual no me parezco a Faustino, eh... por ahí compartimos la característica de la velocidad, pero no me puedo comparar con él", esclarece Yoao en diálogo con Afa.com.ar. "Hice inferiores en América de Cali y Maturana me trajo a la Argentina: vio unos videos de un torneo que jugamos en Italia, tuvo la oportunidad de conocerme y me convocó para venir a Colón de Santa Fe. Lamentablemente allí no llegué a jugar en Primera", rememora el atacante que nació e Istmina (Chocó) hace 29 años.
La adaptación al país no fue fácil: "Yo vengo de un clima tropical y aquí me encontré un invierno duro". Sin embargo, paradójicamente, corriendo detrás de la pelota llegó al gélido sur argentino, donde a fuerza de gambestas y carisma se metió a la gente en el bolsillo a la gente aurinegra. Ya no siente ganas de volver a su país como le ocurrió a los dos años de estar en la Argentina, cuando bajó los brazos y pidió que lo dejaran retornar a Colombia para estar cerca de su familia. La aclimatación fue tan buena que hoy hasta se le escapan varios argentinismos cuando se expresa.
Todavía siente las huellas de las patadas que recibió en su paso por los diversos torneos Federales (visitó las camisetas del Deportivo Roca y Alvarado, entre otros); por eso admite que su sueño es subir de categoría: "Me gustaría jugar en el Nacional B porque el juego puede ser menos áspero y eso quizá favorece mis características". Detras de ese sueño corre y corre el Asprilla austral en el Federal A.