A comienzos del 2017 se dieron a conocer los nombres de los nuevos árbitros que formarán parte del plantel oficial de FIFA, dándole así la posibilidad de impartir justicia en partidos y torneos internacionales. Unos de los elegidos para la especialidad de fútbol playa fue Gabriel Maidana: "La verdad que no me esperaba la designación. Uno siempre trabaja para tratar de llegar a lo más alto y tiene la ilusión de ello, por suerte se dio y lo viví con una alegría enorme junto a mi familia que siempre me acompaña".
Nuestra nueva cara internacional tiene una larga trayectoria con su envestidura negra. Comenzó a dirigir oficialmente en AFA en 2008 con tan sólo 21 años, pero ya estaba acostumbrado a estar dentro de un campo de juego, ya que desde las 16 años el eligió ser partícipe del fútbol desde el lugar en torneos amateurs. Hoy, con 30 años, el mundo de le abre a sus pies.
Fin de semana tras fin de semana, Gabriel sale a impartir justicias en el parquet, ya que su especialidad es el futsal, debido a que no hay aún tantos torneos de fútbol playa, él se aboca a esa disciplina que "alguna que otra similitud tiene y eso ayuda para estar en ritmo en competencia", comenta nuestro protagonista, que además nos cuenta cómo tuvo la posibilidad de comenzar a arbitrar en la arena: "Hace más de 2 años los instructores de ambas disciplinas, playa y futsal, formaron un grupo reducido de árbitros en proyección, equipo que afortunadamente tuve la posibilidad de integrar, en el cual nos preparaban por si en algún momento llegaba la oportunidad de ser designados de a nivel internacional".
Pero no todo es el arbitraje en la vida de nuestro hombre de negro, ya que su trabajo diario tiene que ver con la kinesiología, rubro en el cual se desempeña desde el 2012. "Más de un vez una vez algún compañero me pide consejo o favorcito, ja. Pero lo más anecdótico que me pasó, uniendo la dos profesiones, es que una vez fui a ver a un colega amigo que le tocaba arbitrar reserva de Primera División y lo terminé atendiendo previo al encuentro porque se había contracturado en el calentamiento", recuerda Maidana.
Dos amores demandantes, eso es lo que tiene Gabriel, ya que ambas profesiones le ocupan gran parte de sus días y, hasta a veces, se cruzan entre si. Aquí, sus vivencias: "Generalmente el arbitraje choca con todo o casi todo lo que hago, ya que te puede tocar dirigir cualquier día, a cualquier hora y en cualquier lugar. Les voy a contar una anécdota. Mientras estudiaba kinesiología siempre esa fue mi prioridad, pero me tocó rendir un parcial que duraba dos horas en cuarenta minutos porque sino no llegaba a dirigir. Hoy lo cuento con una sonrisa porque por suerte lo aprobé, ja. En la actualidad, ya recibido, puedo elegir trabajar por mi cuenta y dedicarle ese tiempo que te demanda el arbitraje. Obviamente, creo que pude hacer todo esto gracias al apoyo de mi familia".
Te presentamos una nueva historia arbitral, ya que él como todos tienen su lugar en afa.com.ar, porque #AFASomosTodos.