La Selección Sub 20 tuvo su tan ansiado debut. Después de muchos meses de preparación pudieron salir al campo de juego. Demostraron para qué están y quiénes son. Pero, antes que nada, se probaron a ellas mismas que las ganas y el amor propio las pueden llevar a su tan ansiado sueño: la copa y la clasificación al Mundial.
Bolivia fue el primer rival a vencer. No fue fácil, hubo sorpresas y hasta un gol tempranero que pudo haber cambiado el rumbo de las cosas. Sin embargo, Micaela Cabrera, Yamila Rodríguez y Lorena Benítez impidieron que el primer partido terminara en derrota. Y fueron ellas quienes contaron cómo vivieron el partido: “Al principio, y como siempre por ser el primer partido, nos jugaron en contra los nervios. Más que nada los de algunas chicas que debutaron”, asegura Lorena Benítez, mediocampista nacida el 3 de diciembre de 1998, en Lomas de Zamora.
“A mí, en el primer tiempo, me ganaron los nervios. Me cansé muy rápido porque estaba muy ansiosa, pero seguí adelante por las chicas y por suerte pude convertir el gol del empate”, dice Yamila Rodríguez. Oriunda de Posadas, esta delantera nacida en enero de 1998, logró sortear las emociones que conlleva vestir los colores de nuestro país. Además, con su olfato goleador, llevó al equipo a no rendirse ante la derrota parcial con Bolivia.
El partido soñado para las jugadoras dirigidas por Eduardo Sánchez no fue fácil. El físico se fue agotando con el correr de los minutos y fue más la garra y el amor por la Albiceleste la que las llevó a seguir luchando por esa victoria. Hasta que llegó Micaela Cabrera, con sus gambetas y su potencia, para sellar el 3 a 1 final: “Las que estamos afuera queremos entrar y dar lo mejor para el equipo. Aportar para nuestras compañeras, brindar lo mejor de nosotras para cubrir a las chicas que jugaron todo el partido y estaban cansadas. Cuando entré, lo hice pensando en eso y en el objetivo que venimos a buscar. Por suerte, se me dio el gol que nos ayudó a respirar un poco”.
La alegría del debut ganador quedó atrás. Ahora se viene un nuevo rival: Uruguay. Un cotejo con olor a clásico. Un partido que irá más allá de los tres puntos y sumará el folclore del derby rioplatense. “Nuestra meta es la clasificación y vamos a dejar todo. Uruguay es un equipo difícil, las estuvimos viendo y juegan bien. Pero creemos que hay una linda rivalidad que le va a dar más color al partido. Desde el primer minuto vamos a estar con la cabeza adelante, dejando todo y sin guardarnos nada”, cierran estas tres goleadoras que auguran seguir deleitándonos con sus tantos.