Ganó en cada lugar que jugó. En su paso por Italia, donde compitió en el Arzignano, en Marca y en el Asti, levantó 10 títulos (tres campeonatos, tres Supercopas, dos
Copas Italia y un par de Copas de Invierno) Ahora, se mudó a Portugal para jugar en el Benfica y compartir club con otro seleccionado, Alan Brando. Antes de la
aventura por Europa, tuvo sus consagraciones en nuestro suelo, ya que ganó tres torneos con River y uno con Pinocho.
Fernando Wilhelm es el protagonista de esta historia. Él vestirá una vez más la camiseta Albiceleste. Y también llevará en el brazo la cinta de capitán, en lo que será
la búsqueda del equipo de Giustozzi para conseguir el boleto al Mundial de Colombia. Paraguay lo espera, cómo a todo el plantel argentino. Pero antes de volar hacia
Asunción, este emblema del plantel habló sobre lo que se viene.
-¿Cómo está el grupo para afrontar esta Eliminatoria?
-Bien, estamos bien. Es verdad que tuvimos poco tiempo para trabajar [NR: la Selección empezó a entrenar el 4 de enero, pero estuvo completa completa con los jugadores que se desempeñan en el exterior, recién el sábado 23], pero estamos todos mentalizados en un mismo objetivo y con muchas ganas. Emocionalmente, suma el hecho de estar en casa, volver al país en el caso de los que estamos afuera después de mucho tiempo y veo con unas ganas muy grandes a los chicos que están jugando en el torneo local. Creo que logramos una unión grupal muy buena y eso me pone muy bien".
Con la Selección, Fernando alzó la Copa América en Paraguay 2003, en el estadio Sol de América, mismo escenario donde a partir del próximo viernes se jugará la
clasificación a Colombia. En 2008, subió al podio de otra Copa América. Ya con Diego Giustozzi como técnico, festejó la Continental Cup de Kuwait en 2014.
-¿Seguís pensando que el Seleccionado está para grandes cosas?
-Obvio. A ver, un partido lo puede ganar cualquiera y para eso hace falta una cuota de suerte. Ahora, nosotros vamos por las eliminatorias, entonces estamos trabajando fuerte para que esa cuota de fortuna sea mínima, para no depender de ella. Es por eso que voy convencido de que estando todos bien, podemos competir y ganarle a cualquier rival que nos toque.
-Construiste gran parte de tu carrera en Italia, ¿cómo ven al futsal argentinos en el exterior?
Ahora mucho mejor. Siempre dijeron que eramos una selección competitiva, que era difícil ganarnos, que teníamos buenos jugadores pero que, a la larga, nos iban a ganar. Eso se pensaba hace unos años, hoy creo que ya no están tan seguros de eso. En la actualidad, somos vistos como un equipo que cambió, duro y con un mix de
jugadores jóvenes y experimentados que puede sorprender a más de uno.
-¿Cómo pensás que va a ser el torneo en Paraguay?
-Va a ser duro. Históricamente siempre fue así. Todas las selecciones van a querer clasificarse al Mundial: desde las más potentes a las que, supuestamente, tienen menos nivel. No nos tenemos que descuidar y hay que vivir el torneo partido a partido.
-En lo personal, ¿cómo encarás la competencia que se viene?
-Me siento en un buen momento. Después de diez años en Italia, cambié de país y estoy en Portugal, donde todo fue nuevo. Terminé de adaptarme después de cuatro o cinco meses de vida nueva. De cara a este nuevo desafío con la Selección, siento que tengo la experiencia, las fuerzas y las ganas de que salga todo bien. Veo que el equipo evoluciona y eso me da una fuerza adicional para competir.