06/10/2015

Show de goles: capítulo 27

Para comenzar a recorrer el camino de goles de la jornada 27 de la elite es necesario hablar, en primer lugar, de la apertura del arco. ¿El encargado de debutar en la red rival? Lucas Parodi, de Belgrano, que recibió un centro de Iván Etevenaux y fundió en una imagen a su cabeza junto a la pelota, dejando un fuerte remate bajo que venció la barrera humana de Gabriel Arias, arquero de Defensa y Justicia. Fue el único gol del partido entre piratas y halcones, y fue, también, la piedra angular de los otros 32 gritos de la fecha.

Así pues, en un episodio que repartió un promedio de 2,2 goles por partido, hubo una gran variedad de resultados. ¿Cuántos? Un total de ocho marcadores diferentes (en 15 encuentros), siendo el 1-0 el más repetido: tres veces, en los triunfos de Belgrano, Estudiantes y Boca. Pero si de festejos se trata, no se pueden olvidar los tres duelos con más tantos convertidos: el empate 2 a 2 entre Gimnasia y Olimpo; el 2-2 de San Lorenzo y Rosario Central; y el 3-1 de Aldosivi a Lanús.

Como para ir cerrando este eufórico repaso, cabe recordar el golazo de Marino de media vuelta y volea para abatir la valla de Andrada, de Arsenal. O la palomita de Tagliafico (Independiente) en la apertura del arco de River. O, cómo no, el bombazo, también de volea, de Marco Ruben para el 2-1 parcial entre el Canalla y el Ciclón. En cuanto a la pelota parada, fueron tres emociones arragiadas en los penales. ¿Los autores? Luciano Acosta (único gol de Estudiantes para vencer a Sarmiento), Marco Ruben (aparece nuevamente en escena por su empate transitorio ante San Lorenzo) y el Ruso Rodríguez (marcó el 2-0 del Rojo sobre el Millo).

Pero hay una más. Una de esas jugadas que dejaron boquiabierto a todo un pueblo marplatense. ¿No saben de qué se trata? De una gambeta épica con nombre y apellido: José Sand. Sí, el delantero de Aldosivi eludió a Facundo Monteseirín tirando la pelota para un lado y yendo a buscarla por el otro, para luego dejar atrás su marca y definir al primer poste bajo de Matías Ibáñez. Y ése fue el último rugido del capítulo 27.

Así, se puede concluir en que fue una fecha con buena cantidad de goles, aunque, claro, no supera aún a la gloriosa quinta jornada, que dejó 49 postales alegres. Todavía hay tiempo, ¿podrán batir el récord?