Sin tregua, tras la clasificación de la Selección Argentina de futsal a la semifinal del Mundial y a poco de viajar de Medellín a Cali, donde Portugal será el rival en busca del pase a la final, las sensaciones del plantel son expresadas por Fernando Wilhelm, capitán del Seleccionado y único jugador de este plantel que estuvo en la anterior experiencia argentina en una semifinal de Copa del Mundo, en China-Taipei 2004: “Sabíamos que era muy difícil, que estábamos apuntando bastante alto pero bueno, también sabíamos que era posible, uno de nuestros objetivos era ganar el grupo y lo conseguimos. Otro era irnos de este Mundial habiendo jugado los siete partidos y ya estamos camino a eso... Ahora estamos ahí y vamos por más”.
Una a una la Selección ha ido superando etapas y cumpliendo sus metas: desde la difícil Kazajistán (el rival que lucía como más fuerte del grupo), consumando la clasificación tras derrotar a Islas Salomón y empatar con Costa Rica, contra la que remontó con paciencia y confianza. Ese paso a paso fue templando al grupo, que no despega los pies del suelo, según su capitán: "Nosotros nos ilusionamos al igual que la gente, pero somos conscientes, porque sabemos cómo fue cada partido: aunque quede la victoria, tuvimos que sufrir cada cruce para ganarlo, no fue sencillo. Contra Egipto quizá fuimos más contundentes que en otros partidos pero no es que lo pasamos sin transpirar o sin quedarnos sin aire en algunos pasajes. Fuimos contundentes, a veces la pelota rebota y sale afuera, pero tuvimos un poquito más de fortuna. Lo importante es que nunca dejamos de intentarlo, siempre tratamos de atacar, de llevar peligro, de presionar, de robar la pelota alta para estar cerca del arco rival… Todo eso tuvo su premio, porque convertimos bastantes goles y dejamos nuestro arco en cero”.
Ya dejando atrás el 5-0 Egipto, que llegó al duelo con Argentina eliminando nada menos que Italia, en el horizonte asoma la poderosa Portugal, que trae como bandera a uno de los mejores del mundo y máximo goleador del torneo, Ricardinho. “Lo que viene ahora es durísimo como lo fue hasta ahora; Portugal es una selección que tiene grandes jugadores. A muchos los conozco por tenerlos como compañeros en el Benfica y a otros por enfrentarlos en la liga, va a ser durísimo y además es una semifinal, a un paso de jugar la final del mundo, algo que no te pasa todos los días, así que seguramente va a ser un partido para sufrir pero sabemos que lograr lo que queremos es difícil”, reconoce Wilhelm.
Argentina y Portugal se enfrentarán en una de las semifinales de esta Copa del Mundo el próximo miércoles a las 21 (hora argentina) en la Ciudad de Cali. El otro finalista se definirá mañana, en el cruce entre Irán, que viene de dejar en el camino a Brasil y Paraguay, y Rusia, que superó en cuartos a España, para definir al otro finalista.