Este hecho nunca fue conocido oportuna y oficialmente por alguna autoridad de esta Casa. Antes bien, la AFA tomó conocimiento sobre la afectación de estos jugadores, por informaciones y comentarios periodísticos que se realizaban simultáneamente con el viaje del plantel hacia la ciudad de Rosario, donde habrían de disputar su encuentro oficial por el Campeonato de Primera C ante Central Córdoba.
El viernes 5 de febrero -feriado en celebración del Día del Trabajador de UTEDYC- las autoridades del Club Atlético Argentino de Merlo tomaron contacto con el presidente de la divisional, Señor Adrián Zaffaroni, a quien se le instruyó sobre la necesidad de simples certificados médicos independientes.
Más aun, por tratarse de un feriado, y ante la inminencia del viaje, se les allanó la recepción de tales certificados, brindándoles la excepcionalidad de que los mismos pudieran ser enviados por el soporte tecnológico más simple que ellos eligieran. Por ejemplo, whatsapp. O sea, certificados de cualquiera de los dos hospitales que funcionan en la localidad de Merlo o sanatorios o salas de emergencia o cualquier otro establecimiento sanitario.
Esta facilitación de los funcionarios de la oficina de Torneos de AFA no fue utilizada tal como lo hicieran en oportunidades anteriores y ante situaciones similares, otros clubes como Deportivo Morón (juveniles, 20 de marzo de 2015) o Gimnasia y Esgrima La Plata (reserva y juveniles, noviembre de 2014), solo por citar los últimos dos casos.
Haber enviado certificados médicos por cualquier medio hubiera demandado menos tiempo que el tiempo de transitar diferentes medios periodísticos que convirtieron el lamentable caso en un escandaloso caso.
La Asociación del Fútbol Argentino con su Departamento Médico, y en concordancia con la experiencia y sensibilidad de todos sus dirigentes y funcionarios, jamás obligarán a que un equipo afectado por brote o epidemia alguna dispute un partido en inferioridad de condiciones.