Bajo la dirección del Presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, se realizó una reunión con los máximos representantes del Boca Juniors, el Fluminense, la Asociación del Fútbol Argentino, con la presencial de Claudio Tapia, y la Confederación Brasileña de Fútbol. El tema central abordado fueron las medidas de seguridad en torno a la final de la CONMEBOL Libertadores, prevista para mañana a las 17:00h en el estadio Maracaná, de Río de Janeiro.
El Presidente Domínguez, con la colaboración del equipo de seguridad de la CONMEBOL, expuso las acciones que fueron impulsadas desde la designación, por parte del Consejo de la CONMEBOL, de Río como sede de la final de la Libertadores, el pasado 8 de marzo. Informó asimismo que la organización se encuentra en contacto permanente con las autoridades de la ciudad y el estado.
También fueron repasados el mecanismo de ingreso de los hinchas al estadio, las áreas asignadas a cada club y los planos y el perímetro desplegado en torno al Maracaná. Tratándose de dos clubes con un enorme arrastre popular, se hace indispensable extremar las precauciones para evitar los desbordes y minimizar todo lo posible el contacto entre las hinchadas.
De igual manera, el Presidente Domínguez recordó el compromiso firmado por los titulares de ambos clubes finalistas en la reunión realizada el 19 de octubre en la sede de la CONMEBOL, en Luque, Paraguay. El documento establece que tanto Boca Juniors como Fluminense asumen el compromiso de impulsar campañas y acciones contra la violencia y el racismo en el seno de sus respectivas hinchadas.
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