El Giuseppe Meazza de Milán fue el escenario de una nueva final para el máximo torneo de clubes del planeta. Allí, en San Siro, se enfrentaron dos equipos que se conocen. El Real Madrid, que superó en la semifinal al Manchester City de Agüero y compañía, jugó el clásico ante el Atlético, que tuvo a Augusto Fernández durante 46 minutos y venía de vencer al Bayern Munich para pasar al duelo decisivo. Y el duelo terminó empatado 1 a 1, ya que Sergio Ramos anotó el primero para el merengue, a los 15 minutos de la primera etapa, y Yannick Carrasco igualó las acciones a los 34' del segundo tiempo. Fueron a penales, y el Real Madrid se quedó con la gloria: 5-3.
El Colchonero tuvo gran presencia celeste y blanca. Camino a la Copa América, Fernández, que fue titular, y Matías Kranevitter, que también estará en la Copa América, junto con Ángel Correa y Luciano Vietto, dos armas ofensivas que esperan en la lista preliminar de los Juegos Olímpicos de Río 2016, vivieron la final siendo parte del plantel.
Con este póker de seleccionados, más Diego Simeone en el banco, el Atleti volvió a quedar en las puertas de la historia, porque jugó un gran partido, pero el último penal de Cristiano Ronaldo terminó aguando la fiesta rojiblanca. Real Madrid, campeón de Europa.