Sus historias en la Selección Argentina no comenzaron juntas, ya que Miguel arrancó en 2008 y va por su 20° torneo, mientras que Lucas, quien comenzó en 2011, jugará su 12° campeonato. Pero juntos defendieron los colores nacionales en muchos torneos alrededor del mundo: Copa Latina 2012 en Rio Quente (Brasil); Copa América 2013 en Santos y 2015 en Recife (Brasil); Juegos Odesur 2011 en Manta (Ecuador); Mundial 2011 de Ravena (Italia); Mundial 2013 de Tahití (Polinesia), donde Argentina terminó quinta; y tocaron el cielo con las manos en las Eliminatorias de San Luis, en 2013, donde le dieron el único título de campeón al fútbol playa de Argentina.
La mayoría de sus compañeros harán su primera experiencia internacional en esta Copa América (el promedio de edad del plantel es de 26 años y 4 meses), por eso Miguel habla mucho con ellos de lo que significa defender la camiseta Argentina en este tipo de torneos: “Trato de contarles mis vivencias, mis experiencias, lo que significa jugar con estadios llenos y muchas veces adversos, sobre todo en los clásicos con Brasil. Por cuestiones lógicas, la mayoría de los torneos internacionales en Sudamérica son en Brasil, así que somos visitantes siempre, ja. Además, hablamos de lo que fue aquel título en San Luis, de lo que significa ser campeón con esta camiseta, una sensación increíble.”
Por su parte, Lucas valoró mucho las cuatro semanas de trabajo en el predio de Ezeiza antes de viajar a la Copa América para conocer a sus nuevos compañeros y trasladarles su experiencia: “Fuimos de menos a mayor, a medida que pasaron los días nos fuimos conociendo y entendiendo cada vez mejor. Y crecimos mucho como equipo, algo que es fundamental en este deporte. Encontramos un grupo con muchas ganas de crecer y mejorar día a día.”
A pesar de ser un grupo nuevo y de no haber tenido mucho tiempo de trabajo previo, Miguel tiene claro el objetivo para la Selección en esta Copa América: “Nosotros sabemos que el objetivo principal de este torneo es formar el plantel, tener una identidad de juego y que los chicos tengan roce internacional de cara a las eliminatorias mundialistas de febrero en Paraguay, que es lo más importante, pero igual creo que tenemos potencial para terminar en el podio. Brasil está en nuestra zona y es muy difícil, si no logramos ganarle apuntamos a terminar lo más arriba posible”.
Para lograr el objetivo de llegar al podio, como pretende Miguel, Lucas sabe quiénes son los rivales a vencer: “Brasil es siempre el favorito, Paraguay creció mucho en los últimos años al crear su propia liga, y puede haber sorpresas como Ecuador o Uruguay”