30/12/2015

Los Escorpiones en el año del Mundial

El Fútbol Playa tuvo en 2015 un año dedicado especialmente a las dos máximas competencias de la disciplina, la Eliminatoria y el Mundial. Estos eventos marcaron el desarrollo de una temporada que sirvió para que este deporte acapare, cada día un poco más, la atención de sus simpatizantes. Y de los nuevos seguidores, también…


En tanto, la Selección Argentina de Fútbol Playa empezó a entrenarse en los primeros días de enero, y tuvo durante los primeros meses del año una intensa agenda competitiva de cara al compromiso más importante: el mundial FIFA de la categoría, competencia en la que no ha faltado nunca desde la primera edición de Río de Janeiro 2005.


En la preparación a la Eliminatoria, disputada en Manta, Ecuador, el equipo, dirigido en ese momento por Walter Petrasso, jugaría dos copas: en Viña del Mar, en el mismo mes de enero, y en Recife, en febrero, logrando en ambos campeonatos subir al podio en el tercer lugar.


Al mismo tiempo que se realizaba la competencia en Chile, un segundo grupo de jugadores disputaba dos amistosos en el Predio Julio Grondona contra la Selección de Japón, en gira preparatoria para el mundial, cosechando dos victorias bajo la conducción técnica de Gustavo Casado, quien a partir del 20 de febrero asumiría el cargo de director técnico del Seleccionado Nacional, con Hernán Magrini como colaborador.


El debut de Casado como técnico


“Siempre supe que un día iba a dirigir la Selección, así como supe en su momento que iba a jugar en primera, por mi forma de ser, mi perseverancia. Y llegó ahora el turno con la bandera, un mes y medio antes de un torneo importantísimo como es la Eliminatoria; pero no lo dudé un segundo, tengo confianza en lo que hago y siempre fue así”. Palabras del Chino Casado que debutó con un doble triunfo, en Ezeiza, contra México. Fue el 20 y 21 de marzo cuando la Albiceleste derrotó al conjunto azteca, primer clasificado desde la CONCACAF para el Mundial por 3-2 y 3-1. Ahí sí, sólo restaban horas para que comience la Eliminatoria.


Eliminatorias CONMEBOL, clasificación y victoria sobre Brasil


Con poco más de un mes de trabajo y un plantel conformado por Marcelo Salgueiro, Dardo Cortés, Luciano Franceschini, Lucas Medero, Rodrigo López Úbeda, Federico Costas, Luciano Sirico, Jonathan Levi, Federico López Hilaire, César Leguizamón, Cristian Gómez Cuevas y Santiago López Hilaire, Gustavo Casado viajó a Manta con el único objetivo de clasificar a la Copa del Mundo en Portugal.


Tras un buen debut con victorias sobre Venezuela (7 a 6) y Perú (por penales), Argentina cayó en el tercer partido ante Uruguay y llegó obligada a ganar el último partido de la primera fase ante Brasil, con un historial claramente favorable al equipo verdeamarelo. De hecho, una sola victoria contabilizaba Argentina en torneos oficiales, en el mundial de 2001 en Sauipe, Brasil, cuando la competencia no tenía todavía el auspicio de la FIFA.


Pero la Celeste y Blanca fue bien defendida y enaltecida, porque en un partido de desarrollo cambiante, que se empezó ganando con gol de Lucas Medero, que se empató 2 a 2 a través de Leguizamón y se llevó a 5-3 a través de los goles de Sirico, Federico Costas y, otra vez, César Leguizamón, Argentina sufrió el empaté cuando quedaba sólo un minuto y medio para el final. Y cuando parecía que la fiebre amarilla se agrandaba para oprimir las ilusiones criollas, Luciano Sirico y Santiago López Hilaire se vistieron de héroes y marcaron dos tantos para decretar el 7-5 final. Para decretar un día histórico.


De esta forma, Los Escorpiones ya empezaban a picar fuerte, y llegaron hasta las semifinales, etapa que valdría la clasificación a la ansiada máxima competencia. A pesar de la derrota frente a Paraguay, Argentina superó a Ecuador en el encuentro por el tercer lugar, y entró al podio de vacantes en la grilla de los equipos que viajarían a Portugal.


El Mundial de Portugal: Argentina, presente


La Selección se abocó durante los meses de mayo y junio a la preparación del equipo para el torneo más importante con dos y hasta tres entrenamientos semanales, dirigidos por Casado con la colaboración de Hernán Magrini y Esteban Pizzi en la preparación física. Argentina no había faltado en ninguna de las ediciones de la Copa Mundial FIFA, realizadas desde 2005, y tampoco faltaría en esta edición, la octava, en Portugal.


Dardo Cortes, Mariano Mansilla, Luciano Franceschini, Federico Lopez Hilaire, Santiago López Hilaire, Miguel de Ezeyza, Rodrigo López Úbeda, Facundo Minici, Federico Costas, Luciano Sirico, Lucas Dupiellet y Federico Simsiroglu fueron los doce elegidos por el técnico para afrontar la competencia.


Tras un debut auspicioso en tierra lusa, 4 a 3 sobre Senegal, la Albiceleste caería ante Japón, el mismo equipo al que había derrotado en los meses de preparación. Luego, cedería ante el local, la poderosa selección de Portugal, más tarde campeona de la competencia. Eso significó la despedida del Mundial, pero no la resignación de la idea.


Luciano Franceschini, capitán del equipo de Casado, ahondó sobre el trabajo desarrollado: “Creo que, en general, el torneo fue bueno. Jugamos contra selecciones que son muy fuertes y que han crecido más que nosotros”.


¿Creían que el 2015 había terminado? Pues no, nuestra bandera siguió volando alto. Si hasta Dubai viajó…


Argentina cerró el año en la Copa Samsung junto a Rusia, Emiratos Árabes, Egipto, Portugal (campeón del mundo) y Tahití (subcampeón del mundo), entre otros equipos. Epílogo de gala para culminar el año a pura práctica, de vuelta en el país. Y la competencia sigue en 2016…


“No llamaría al regreso a entrenamientos una revancha; sí es una oportunidad para mejorar y seguir creciendo”, concluye Franceschini, y mira aún más allá: “Me gustaría jugar las Eliminatorias y el próximo Mundial de Bahamas 2017. Claro, y colaborar con mi experiencia, transmitirla a los más jóvenes del plantel, que son muchos”.