El jugador que supo ser campeón de los Sudamericanos Sub 15 y Sub 17 con la Selección suma su #RetratoJuvenil desde Misiones 24/04/2020

Luciano Vera: "Este momento se supera con solidaridad y responsabilidad, como en la cancha"

Recordadas deben ser las carreras infinitas de Luciano Vera dejando alma y vida para ganar el campeonato sudamericano Sub 15 en noviembre de 2017, tras vencer junto a sus talentosos compañeros a Brasil por 3 a 2 en la final disputada en San Juan. También quedaron en la memoria las barridas y, cómo no, los lujos de este particular carrilero como pieza fundamental del exquisito equipo que se consagró en Perú en 2019, brindándole a nuestras Selecciones Juveniles la gloria absoluta en territorio continental. Sí, Vera es ese jugador polifuncional que nos divierte, nos emociona y nos sorprende con su cuerpo desgarbado y su marca registrada de técnica y pasión. Es ese jugador que formó parte de la exitosa camada 2002 de Argentina que obtuvo, además de los Sudamericanos, el trofeo Valentin Granatkin en Rusia, y como si fuera poco participó de un Mundial (Sub 17, Brasil 2019). "Tengo grandes recuerdos de ese grupo. En realidad, más que un equipo de fútbol éramos una familia y se extrañan muchas cosas de las que compartimos con esos amigos, tanto en la cancha como fuera de ella", confiesa el juvenil de 18 años, que sigue nutriéndose de conocimientos en la cantera riverplatense: "Ahora estoy jugando en mi categoría, la Quinta División. Venía bien, de hecho había debutado en Reserva y fui al banco varias veces. Desde el club me habían informado que existía la posibilidad de quedar en Reserva, de escalar digamos, pero la crisis por la pandemia enfrió todas las actividades".

Luciano Vera en plena disputa frente a España, en duelo por la Copa del Mundo Sub 17.
Luciano Vera disputa el balón en la Copa del Mundo Sub 17, en encuentro frente a España.

Ahora, el misionero pasa la cuarentena en Wanda, su pueblo natal.

-¿Con quiénes te toca transitar el período de aislamiento? ¿Cómo se dividen las tareas de la casa?

-Estoy con toda mi familia. Está mi papá, mi mamá, mi hermano, mi hermana con el marido, mi sobrino y mi abuela. Somos unos cuantos para pasar el tiempo. En mi casa nos dividimos las tareas entre todos, y limpiamos a fondo una vez por día. Nos vamos turnando con los quehaceres por ciclos, ya que el que un día lava los pisos no puede hacerlo al día siguiente; es decir, pasa a la estación de los platos, por ejemplo, ja.

-¿Cuando se decretó el aislamiento obligatorio vos ya estabas en Wanda o todavía en la pensión de River?

-Al principio tuve miedo, porque estaba en Buenos Aires cuando comenzaron a estallar las noticias. Viviendo en la pensión de River y lejos de casa, la verdad es que todos los chicos teníamos cierta incertidumbre, sobre todo porque tampoco sabíamos cuál era la situación de cada chico y el riesgo que eso podía traer. Finalmente el club nos dio el permiso cuando fue necesario y volví para mi pueblo.

-¿Y cómo venía tu actividad en River? ¿Tenías minutos en Reserva?

-Antes de que se decrete la cuarentena yo estaba entrenando dos o tres veces a la semana en Reserva. Me van acomodando dependiendo de lo que decide Marcelo Gallardo con sus jugadores de Primera; es decir, si necesitan gente en Reserva frecuentemente se habre la posibilidad de que yo esté. Jugué algunos partidos y fui al banco también, pero ahora no sé cómo seguirá todo porque lamentablemente el Covid-19 cortó la continuidad.

-¿Cómo se comunica la gente del club con sus jugadores?

-El club nos contacta por Zoom, y nosotros nos conectamos lunes, martes y jueves para entrenar de 10 a 12. El entrenador, el coordinador y el preparador físico son los que guían los trabajos.

-¿Te mantenés en contacto con tus compañeros?

-Sí, claro. Seguimos hablando con los chicos de la Selección y tambíen con los de River, porque tenemos distintos grupos de whatsapp. Con los chicos de la pensión también tenemos mucha confianza, porque vivimos gran parte del año juntos. Es fundamental en este momento mantenerse en contacto con la gente que uno quiere.

-¿Cómo recibieron las notificaciones restrictivas en Wanda?

-Es un pueblo chico, tiene unos veinte mil habitantes, y la noticia llegó a nivel masivo por medio del intendente, que informó que en todas las esquinas iba a haber policía y que era obligatorio usar barbijo y también volver a casa cuando se indicara. Si no, hay inconvenientes legales que recaen en el que no cumple. Igual, la realidad es que gran parte de la gente cumple. En mi familia, a menos que sea para alguna compra importante, o por el trabajo de mi papá, nadie sale.

-¿Cómo responde socialmente tu pueblo a la consignas de las autoridades respecto de la pandemia?

-Acá en Wanda la gente se porta muy bien. Desde las 8 hasta las 12 puede haber gente en la calle, pero con barbijos y respetando las restricciones. A las 12 suena una sirena para que todos vuelvan a sus casas. Lo mismo desde las 15 hasta las 17.30, donde la gente puede hacer compras esenciales y demás, pero luego suena la sirena y pasan las patrullas para corroborar que todos vayan a sus casas.

-Hablabas de que tu papá sale para trabajar. ¿Cumple con una labor esencial?

-Mi papá sigue trabajando porque es operador de autoelevadores en un empresa industrial, y su tarea está eximida de restricciones. Lógicamente, sí tiene que adaptarse a trabajar bajo nuevas normas, como por ejemplo no compartir mates ni utensilios, mantener distancia social de un metro y medio, utilizar indumentaria específica...

-¿Qué precauciones suma él?

-El tema de la ropa es importante, él se va protegido y cuando llega al trabajo le hacen una desinfección, además de tener barbijos distintos para ir y venir. Por otro lado, al llegar a casa lo primero que hace es dejar la ropa para lavar y sin saludar se va a bañar. Después sí hace vida normal, dentro de las limitaciones lógicas, y nos cuenta que es realmente agotador el día a día, porque a su trabajo tiene que añadir muchas medidas que también implican tiempo y dedicación.

Imagen de un amistoso frente a Nueva Zelanda con la Sub 17.

Con conocimiento de causa, Luciano Vera se suma al "quedate en casa" y es consciente de que la única manera de superar este momento es "con solidaridad y responsabilidad, como en la cancha". Un testimonio más, que esta vez llega desde Misiones, para seguir conectados a través del #RetratoJuvenil.