En la previa del debut en los Juegos Panamericanos (este sábado a las 15.05, ante Trinidad y Tobago), tres futbolistas de la Selección Femenina se divirtieron con un típico juego de entrenamiento que sirve para relajarse y, a la vez, es útil para trabajar la precisión.
Las reglas estaban claras: cada jugadora tenía tres chances para patear y el objetivo era pegarle al travesaño; la que más veces lo conseguía, ganaba; las otras dos debían pagar un asado.
Luego de coordinar el orden de ejecución -mediante el clásico "piedra, pepel o tijera"-, las chicas se sometieron a un desafío que se definió en el último disparo de los nueve estipulados: cuando parecía que no iba a haber aciertos, Agustina Barroso (22 años) superó a Karen Vénica (23 ) y Alana García (26) con un remate suave y bombeado que impactó de lleno en el travesaño. Un cierre perfecto para la chica de Tandil, que le dedicó el triunfo a su familia y no descartó sumarla para disfrutar su premio.