"Poder entrenar y ganar experiencia en la Selección Sub 20 es algo único, nos aporta mucho como personas", afirma Juan Foyth, defensor central de Estudiantes y, ahora, albiceleste. Habla en nombre de todo el grupo. Claro, en nombre del cuarteto pincha que la descose sobre el césped de Ezeiza. Porque los primos Facundo, delantero, y Lucas Bruera, arquero, se suman al sentimiento de Juan y al de Carlos Lattanzio, extremo izquierdo, que también viaja con ellos día a día para presentarse a las prácticas de Argentina. "Tres de los cuatro manejamos, y nos turnamos con el tema del auto para ahorrar nafta. Vamos siempre juntos, desde La Plata", cuenta Foyth.
Lógicamente, una vez en el predio de AFA la emoción los sacude: "Es hermoso jugar acá, porque la cancha es impecable". Y así corre la pelota, elegante, como el andar de estos futbolistas que destacan "la dinámica y la idea de salir jugando", trabajo similar al que realizan en Estudiantes. "Tanto en el club como acá, en el Seleccionado, hay un gran nivel de técnicos y coordinadores, todos crecidos en el ámbito futbolístico, lo cual ayuda mucho", dice Foyth. Y pone su firma al hablar, conociendo la materia, ya que por la noche estudia en un Profesorado de Educación Física, sobre conceptos futboleros: "El juego actual es muy técnico, pero sobre todo muy físico, y en eso ahonda Martín Bouissou (preparador físico en la institución platense), lo cual nos prepara bien para estar a la altura de lo que piden el Vasco (Olarticoechea, DT interino del Sub 20) y Pablo (Calderón, ayudante de campo)".
Asimismo, los cuatro, que no por casualidad forman parte de la citación al Sub 20, agradecen "las variantes a la hora de resolver" que practican cuando visten bastones rojos y blancos y, sin dudas, el "fogueo" que otorga el ponerse la Celeste y Blanca. Con la alegría intacta, este cuarteto se hace notar y enaltece la labor de club y de Selección. Esa Selección que enfatiza en profundizar la identidad argentina. Esa Selección que ruge gracias al aporte del León.